Aprenda qué buscar y cómo obtener ayuda para SAD.
A medida que los días se acortan, la cantidad de luz solar disminuye y, en gran parte del país, está oscuro a la hora de la cena. Combine eso con el estrés, la fatiga y el ajetreo y el bullicio de la temporada navideña, y no es de extrañar que la depresión estacional, conocida como trastorno afectivo estacional (SAD), sea más común de noviembre a febrero.
La combinación de la falta de luz y el paso de las vacaciones puede ser una combinación potente y negativa. Los ritmos biológicos están apagados debido a la menor cantidad de luz solar, la disminución de los niveles de serotonina, el aumento de los niveles de melatonina y una sensación de decepción después de las vacaciones. Para algunos, incluso puede ser un sentimiento de remordimiento cuando se dan cuenta de cuánto dinero gastaron en regalos. Esto puede hacer que las personas se sientan aletargadas y sin un sentido de propósito, y hacer que la depresión se convierta en una bola de nieve.
Los signos y síntomas del TAE
Según el Instituto Nacional de Salud Mental, la depresión mayor puede incluir síntomas como pérdida de interés en cosas que disfrutaba anteriormente, cambios en el apetito o el peso, problemas para dormir y sentirse deprimido la mayor parte del día, casi todos los días. Aquellos con SAD pueden experimentar síntomas adicionales que incluyen los siguientes:
- Dormir demasiado (hipersomnia)
- Comer en exceso, en particular con ansias de carbohidratos
- Aumento de peso
- Retraimiento social (sentir la necesidad de "hibernar")
Encuentre ayuda cuando la necesite
Si bien muchas personas experimentan síntomas más leves asociados con los cambios de humor estacionales, es importante hablar con su médico si sus síntomas se agravan. Por ejemplo, si nota cambios que le dificultan realizar sus tareas diarias o si sus sentimientos están cambiando su forma de pensar y sentir.
Combatiendo la tristeza estacional
Para aquellos con síntomas más leves asociados con los cambios estacionales, aquí hay algunas cosas que puede hacer para ayudar a perseguir la tristeza del invierno.
Manténgase conectado con las personas. Aunque estos tiempos difíciles pueden dificultar la reunión con amigos y familiares, hay formas de mantenerse conectado. Aproveche tecnologías como Zoom que le permiten ver y hablar con sus seres queridos. Considere invertir en un dispositivo que le permita chatear por video con amigos con dispositivos compatibles. Si eso no es una opción, explore formas de conectarse al aire libre. Si todo lo demás falla, manténgase conectado por teléfono. Y recuerde acercarse a aquellos que puedan estar luchando.
Ejercicio. Moverse más puede ayudarlo a sentirse mejor y potencialmente mejorar su estado de ánimo. Algo tan simple como caminar es una excelente manera de mantener su cuerpo en movimiento. Asegúrese de salir cuando el clima lo permita. (Consulte con su médico antes de comenzar una nueva rutina de ejercicios).
Deja que pase el sol. La disminución de la exposición a la luz solar puede afectar su estado de ánimo. Abre las cortinas y disfruta del calor del sol durante 15 a 20 minutos, o considera comprar una lámpara de luz solar artificial.
Encuentra un pasatiempo. Tómese este tiempo en casa para explorar un nuevo pasatiempo o vuelva a comprometerse con una actividad que alguna vez disfrutó pero en la que ha dedicado menos tiempo a lo largo de los años. Explore los recursos en línea para tomar una clase o aprender un nuevo idioma u otra habilidad.
Si usted o alguien que conoce está experimentando estos síntomas, no dude en pedir ayuda.
Otros recursos: